RAFAELILLO PIERDE 3 OREJAS 3
DOS MIURAS ENTRE EL DESIERTO DE LA CASTA.
LAMENTO DE RAFAELILLO
Si existe un Dios del toreo coge vacaciones por San Fermín. La justicia brilla por su ausencia en el Olimpo de los toreros. Rafaelillo pudo cortar tres orejas y el premio se quedó en una vuelta al ruedo.
Sorteó el murciano el toro menos malo de los miuras. Salió a por todas Rafaelillo y recibió con una larga cambiada a su primero y tres faroles a su segundo. Fue en éste donde llegó lo mejor de la tarde. Sabía Rafael que perdió una en el segundo de la tarde y se fue a por las dos del quinto. Firme y torero se pegó el arrimón y sometió en su muleta al toro de Miura. Tenía una y se hubiese pedido con fuerza la segunda pero la caprichosa justicia hizo que pinchara arriba y, por si faltaba algo, el toro se lastimara la mano y no le quedara más opción que descabellarlo. Dio una vuelta como premio, escaso en comparación con el esfuerzo y su buena actuación.
RAFAELILLO
Padilla, todoterreno querido en la capital Navarra, contentó a los tendidos en los tercios de banderillas, poco lucido por el mal juego de los toros. El primero era soso con ganas, lo intentó algo más por el derecho pero Padilla no se complicó y puso rumbo al cuerto, pero a este sólo pudo matarlo.
Matarlo o no, esa es la cuestión. Se le planteó la duda a Jesús Millán con su lote en Pamplona. Dos pavos salieron de toriles, con cuajo y mucha guasa. Apretaron y buscaron al torero. Ambos se negaron a pasar más que lo justo por la muletilla del de zaragoza. Pinchó repetidas veces y las peñas, ni la sombra, vieron el tremendo esfuerzo que hizo en el sexto.
Toros de Miura, bien presentados, cornalones aunque estrechos por detrás. 1º, manejable aunque flojo. 2º, descastado. 3º, orientado y con peligro. 4º, descastado. 5º, manejable aunque bajo de raza. 6º, descastado.
Juan José Padilla, silencio en ambos.
Rafaelillo, saludos tras aviso y vuelta al ruedo.
Jesús Millán, silencio y silencio tras aviso.
6º ENCIERRO.
TOROS DE
MIURA
INFORMA BURLADERO.COM
- MIURA
Un ejemplar de Miura, de nombre «Ermitaño» ha protagonizado un encierro peligrosísimo por las calles de Pamplona, al quedar descolgado en la curva con Estafeta, donde la manada de Zahariche resbaló casi al completo. Tras ese momento, el encierro adquirió tintes dramáticos, con varios corredores corneados, alguno de mucha gravedad.
Casi cinco minutos tardó en recorrer el encierro el toro descolgado, un berrendo en cárdeno que arremetió contra todo lo que encontró a su paso, corneando a varios mozos, especialmente en la zona de la bajada al callejón de la plaza, donde se cebó con un mozo.
El primer tramo del recorrido, hasta el Ayuntamiento, lo recorrió la manada compacta, con los mansos por delante junto con un ejemplar abriendo torada, que ya volteó a un corredor. Estirado el grupo pasaron por la casa consistorial, a ritmo rápido.
En la calle Mercaderes comenzó el drama, al empitonar a un mozo en el cuello y resbalar posteriormente. En la curva, donde resbaló un toro provocando la caída del resto del grupo, comenzaron los momentos más tensos. Los primeros toros de Miura llegaron bien a la plaza, abriéndose paso entre la multitud, que registró numerosas caídas y pequeños montones.
Mientras, ‘Ermitaño’ se volvía causando momentos de peligro, fundamentalmente en Telefónica y bajada al callejón, donde ni corredores ni pastores han podido evitar derrotes hacia ambos lados del vallado, cebándose especialmente con un corredor, volteado en el aire tras ser corneado y al que desplazó varios metros hasta que otros corredores han conseguido retirarlo a rastras del toro.
4 HERIDOS POR HASTA DE TORO
Los dos corredores heridos de mucha gravedad esta mañana en el sexto encierro de las fiestas de San Fermín han pasado a la UCI de los centros hospitalarios en los que permanecen ingresados tras ser intervenidos quirúrgicamente, según ha informado el servicio de salud de la comunidad.
- PELIGRO EN PAMPLONA
El mozo pamplonés de 44 años que ha sido corneado en el tórax y muslo izquierdo en Telefónica ya se encuentra en la UCI del Hospital de Navarra. Según han detallado, en primer lugar le han intervenido los cirujanos torácicos de la herida penetrante en el esternón, por debajo de la clavícula izquierda, que arrancada parte de la segunda costilla con el cartílago y tenía rota en dos la arteria mamaria y eso perforaba la pleura mediastínica y la parietal derecha.
Además, el mozo también tenía una cornada en la parte posterior del muslo, debajo de la zona glútea, que tenía dos trayectorias, una más superficial y otra más profunda, de unos 15 centímetros, que llegaba a la zona del hueso izquierdo de la pelvis.
El segundo herido muy grave, corneado en el cuello en el tramo de Mercaderes, es un calagurritano de 56 años. Tenía una herida por asta de toro a nivel cervical derecho de unos cuatro centímetros por debajo de la mandíbula, que no afectaba el paquete vascular, con un trayecto ascendente hacia la boca. Después de estabilizarlo se ha tenido que atender una herida compleja, con doble trayectoria, una que sigue el eje vascular, desde la parte media del cuello hasta la base del cráneo y otra que giraba hacia arriba y hacia la izquierda por detrás de la pared posterior de la faringe que disecaba y rasgaba, entraba por el cuello y salía por dentro de la faringe, en la parte posterior de la boca. Para controlar la vía aérea, se le ha realizado una traqueotomía.
El sexto encierro de las fiestas, protagonizado por toros de Miura, ha arrojado un balance de cuatro heridos por asta de toro. Dos de ellos, según reconocen los portavoces sanitarios, con carácter muy grave. Sin embargo, el equipo médico ha asegurado que «en principio no hay compromiso vital».
El más grave es un varón de 44 años, que ha sufrido dos cornadas en Teléfonica. El otro corredor herido de mayor gravedad es un mozo de 56 años, empitonado en el tórax a la altura de Mercaderes.
Ha sido tal la gravedad de los encierros, que portavoces sanitarios, jefes de servicio médico y los cirujanos torácicos que han operado han convocado una rueda de prensa. La doctora Vila ha asegurado que el varón de 44 años «se encuentra en estado muy grave. Ha llegado estable hemodinámicamente y cuando ha bajado de la ambulancia ha pasado directamente a quirófano porque tenía una herida penetrante a nivel de esternón, por debajo de la clavícula izquierda y estaba arrancada parte de la segunda costilla».
Al operarle los doctores han comprobado «que la segunda costilla estaba rota con el cartílago y también la arteria mamaria estaba seccionada en dos y eso ha perforado la pleura mediastínica e iba hasta la pleura derecha».
Según ha explicado Vila, se le ha operado y se le han puesto dos drenajes y otro más en la parte derecha ya que tenía perforada esa pleura. Además, se le ha operado de otra cornada en la cara posterior del muslo izquierdo.
- 2 HERIDOS MUY GRAVES
El otro corredor herido de pronóstico muy grave es un riojano de 56 años que presenta «una herida de asta en el cuello penetrante y con dirección ascendente» y se está valorando el alcance, si penetra en cavidad bucal o hacia arriba».
Junto a ellos, han sido corneados un madrileño de 31 años en el muslo derecho y un varón de 51 años con una cornada en el brazo.
Desde el Hospital de Navarra ha sido trasladado al Hospital Virgen del Camino para ser operado un varón de 31 años de Madrid, quien ha sufrido una herida por asta de toro en el muslo derecho.
En ese centro hospitalario está siendo también intervenido de una herida por asta de toro en el brazo un varón de 51 años.
Junto a los cuatro heridos por asta, hay media docena de trasladados a centros hospitalarios:
– Varón de 32 años con traumatismo craneoencefálico leve.
– Varón inglés de 21 años con varetazo.
– Varón riojano de 25 años con pisotón en abdomen.
– Varón de Barcelona de 25 años con traumatismo craneoencefálico.
– Varón de Noáin de 25 años con contusiones.
– Varón madrileño de 26 años con traumatismo en tobillo.
El portavoz del hospital de Navarra, Javier Sesma ha subrayado en rueda de prensa que la gravedad de dos de los heridos es «importante», añadiendo que «los datos disponibles hasta el momento son que, aún siendo una situación de alta gravedad, en un principio no hay un compromiso vital».
A PORTA GAYOLA 
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